Nos encantan los parques, son increíbles para ir a pasar el rato o hacer actividad física. Pero no todos permiten la entrada a cualquier persona, a menos de que se trate de un parque público. Un parque público es un lugar para todos, donde niños y adultos pueden frecuentar y pasar un rato agradable. Aunque muchos tienen sus reglas, ninguna es en contra del acceso a cierta clase social.

PROPIEDAD DEL ESTADO

Si bien es cierto. los espacios públicos, llámese calle, biblioteca o parque son “propiedad” del Estado. El Estado lo conformamos nosotros como sociedad y no podemos apropiarnos (legalmente) de un lugar asignado como espacio público. Así es como sociedad y Estado buscan mejorar su parque público. Por medio de un Comité de parque puedes trabajar en la mejora de tu espacio realizando gestiones con Ayuntamiento. Cuando formas parte de un Comité formalizado en Ayuntamiento es más probable que obtengas el recurso solicitado para tu parque público.

PARQUE PRIVADO Y PARQUE PÚBLICO

No todos los parques son de paso libre, es aquí la diferencia entre un parque público y uno privado. En el primero, cualquier persona tiene derecho a estar y circular libremente, en el otro no. Debido a que es propiedad privada el territorio de la ciudad en donde este tipo de parque está. Lo que significa que alguien pagó por ese terreno y solo esta persona decide quién hace uso de sus instalaciones. Los parques privados los encontramos en fraccionamientos o privadas, aquellas que cuentan con seguridad o casetas de vigilancia al entrar. El parque público crea identidad en la zona donde se asienta ya que se vuelven pertenencia de las personas. Es común escuchar “mi parque” o “nuestro parque”, en realidad sí es un espacio tuyo y de igual forma es tu responsabilidad (y del Estado) mantenerlo.